El modelo de PLoS

Sobre las revistas gratuitas de la Public Library of Science

La noticia del mono que ha logrado mover un brazo robotizado con sus ondas cerebrales dio la vuelta al mundo el pasado 13 de octubre. La importancia de esta investigación, que significa un decisivo paso adelante hacia el control mental de las prótesis funcionales, deja en segundo lugar otro hecho que en este caso es asimismo importante: la revista donde se ha publicado. No es Nature, Science u otra de las grandes, sino un nuevo y desconocido mensual gratuito en internet llamado PLoS Biology, cuyo primer número salió en octubre (el trabajo sobre el control neural del brazo electromecánico se publicará en el número de noviembre) y que es, por ahora, la primera gran apuesta de la organización no lucrativa Public Library of Science (PloS) para la difusión gratuita de la investigación científica.

La PLoS, que fue fundada hace tres años por unos 30.000 científicos, entre ellos 13 premios Nóbel, pretende hacer la revolución científica con sus revistas. No sólo quiere ofrecer ciencia de primera calidad para competir con las más prestigiosas cabeceras, sino hacerlo desde un modelo de negocio diferente que, si triunfa, podría dar al traste con el actual sistema de suscripciones. El modelo de PLoS, basado en la gratuidad total de los contenidos, implica que los costes de un proceso editorial de primer nivel sean sufragados no por los lectores sino por los autores del trabajo. En PLoS Biology, los investigadores pagan 1.500 dólares por la publicación de su trabajo, sujeto por lo demás al mismo proceso de peer review y demás estándares de las revistas de calidad. En la mayoría de las investigaciones, según PLoS, esta cantidad no representa ni un 1% del coste total de la investigación y los patrocinadores estarían dispuestos a sufragarla, pues lo que desean los científicos es que su trabajo tenga la mayor difusión posible. El actual modelo de suscripciones, demasiado caras para muchos países e instituciones, representa no pocas trabas para la ciencia, cuyo progreso se basa precisamente en el libre acceso a la información de las investigaciones previas. Otra de las innovaciones que introduce PLoS Biology es que cada investigación original se acompaña de un resumen redactado por divulgadores científicos para que pueda ser mejor comprendida por los lectores no especializados.

Aunque no es la primera revista gratuita que aspira a competir con las más grandes ni la única alternativa de acceso gratuito (BioMed Central publica un centenar de revistas gratuitas), los crecientes apoyos públicos y privados que está recibiendo la PLoS invitan a la esperanza. Cambiar el modelo no es fácil, pues hay que vencer sobre todo la resistencia de los investigadores a publicar en las revistas dominantes. Muchos investigadores están esperando a ver qué pasa en los próximos meses. Por el momento, para mediados de 2004, la PLoS ha anunciado que empezará a publicar PLoS Medicine para competir directamente con el New England, el JAMA, The Lancet, el BMJ y otros.


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *